[Bariloche, Río Negro, Argentina]
Verónica Merli es abogada y escritora. Nacida en Rosario en 1970, reside en San Carlos de Bariloche desde 1996. Obtuvo un doble primer premio por dos de sus libros de poesía Memoria del cuerpo y Para Madre de tus hijos. Primer premio de la provincia de Río Negro por Noche Polar en 2006. Con Las vacas de Omaha obtuvo el Premio “Marosa di Giorgio”, en conjunto con la Municipalidad de Salto. Mención por Bariloche los manzanos y el frío en 2016. Incluida en las antologías Leer la Argentina, Antología del sur argentino, Poesía Río Negro, Poetas patagónicos, Breve tratado del viento Sur, entre otras.
Poemas
EL NEGOCIO DE LA RUDEZA
quiero que me digan
de qué nos han servido
siglos de sonrisas a media lengua
de camas silenciosas
de miradas furtivas
quiero que me digan
cuándo fue que comprendimos
que de nada sirven
los buenos modales
en la guerra
que me digan cómo vamos
a defendernos
de ahora en más
estamos cansadas de envolver la verdura
con la foto de nuestras mujeres
muertas
en el diario
no tenemos más lágrimas que verter
no tenemos más ganas de amar
ya basta señores
vuelvan a la cueva
y aprendan moral de los primates
nosotras,
estamos aprendiendo
estamos trabajando en equipo
hablamos por las silenciadas
las abusadas
las mutiladas
las descartadas en el basural
estamos aquí para defender el territorio
para que ya no sea
nuestro cuerpo
el campo de batalla
(Inédito)
QUE MI CAMA TENGA MIGAS
que las siga teniendo
que el niño salte
ensucie las paredes
que mi cabeza estalle
de tanto griterío
que mi cuerpo
cansado
me recuerde
el paso de los bueyes
que la lluvia cansina
me arranque este piloto
y me quede en pelotas
en medio de la calle
porque quiero seguir siendo
esta mamacita dura
esta mamacita blanda
repártanse mis huesos
repártanse mi cuero
que con todo lo vivido
yo me quedo
repártanse mis huecos
y mi monedero
que con todo lo vivido
yo me quedo
Del libro Predadoras, incluido en la compilación Celebracion de lo incompleto, Edit. Espacio Hudosn, 2019.
es llamada
un viernes a la tarde
a sacar a un preso político
está vestida de niña
pero igual se anima
mientras espera
en la recepción machimbrada
una respuesta
que no ha de llegar
piensa
por qué los abogados
buscan respeto
con cashemire
y no con cuero o vinilo
ella cree
que el mundo la invade
y debe defenderse
de la cópula
con el mundo
nació el niño
niño al que debe educar
y proteger
del frío en los cachetes
de las armas
pasadas las diecinueve
ajusta el tapado fucsia
mientras zigzaguea la calle
y comete el mejor error:
el ser pequeña
Del libro Ultimos pájaros de la tarde, incluído en Celebración de lo incompleto, Edit. Espacio Hudson, 2019.